Festeja la FQ el décimo aniversario de la Unidad de Química en Sisal, Yucatán

Contribuye al conocimiento y desarrollo de las zonas costeras

La Facultad de Química (FQ) cumplió un exitoso ciclo en su historia al conmemorar el décimo aniversario de su Unidad de Química en Sisal, Yucatán (UQS) –uno de sus dos polos de investigación foráneos–, reconocido a nivel nacional e internacional por sus contribuciones al conocimiento y desarrollo sustentable de las zonas costeras de México.

Como parte de los festejos, el pasado 27 de octubre, el Director de la FQ, Jorge Vázquez Ramos, participó en el Coloquio La Unidad de Química en Sisal: una mirada retrospectiva a diez años de su fundación y, además, inauguró el Laboratorio de Ecotoxicología y Ecología Microbiana; así se amplió a cinco el número total de laboratorios con los que cuenta la Facultad en Yucatán, de los cuales tres se ubican en la sede Sisal y dos más en el Parque Científico Tecnológico de Yucatán (PCTY).

En presencia del Coordinador General de la Unidad Académica de Ciencias y Tecnología de la UNAM en Yucatán, Xavier Chiappa Carrara, así como académicos y alumnos, Vázquez Ramos hizo un reconocimiento a Santiago Capella Vizcaíno, quien fundó la UQS, la cual, dijo, a diez años de distancia cuenta con una planta académica fuerte y consolidada.

En su oportunidad, la coordinadora de la UQS, Gabriela Rodríguez Fuentes, señaló que son dos las principales líneas de investigación que se realizan en esta Unidad: Productos naturales marinos, consiste en identificar productos naturales de fuentes marinas con potencial farmacológico o industrial, y Ciencias ambientales costeras, la cual estudia la presencia, el movimiento y el efecto de contaminantes (plaguicidas, hidrocarburos y metales) en diversos componentes bióticos (seres vivos presentes en un ecosistema, incluido el hombre) y abióticos (agua, sedimento y suelo) de los sistemas costeros.

Gabriela Rodríguez precisó que en la sede del PCTY existen otros dos laboratorios de la Facultad de Química: el Laboratorio de Análisis de Isótopos Estables, encabezado por Santiago Capella Vizcaíno –quien dio una conferencia sobre su funcionamiento–, que ofrece servicios de calidad en el análisis de la razón de los isótopos estables de los elementos ligeros para la investigación y las actividades productivas y de servicios, y el Laboratorio de Genómica de la Diabetes, grupo que lleva varios años investigando el fondo genético de susceptibilidad a diabetes en comunidades indígenas mayas.

Rodríguez Fuentes explicó que, desde su creación, la UQS ha realizado proyectos con financiamiento de la Facultad de Química y externo, además de que todos los académicos de la Unidad están involucrados en cursos de licenciatura y posgrado; por ejemplo, la Licenciatura en Manejo Sustentable de Zonas Costeras de la Facultad de Ciencias y el posgrado de Ciencias del Mar y Limnología.

Su red de colaboración incluye a instituciones regionales, nacionales e internacionales; asimismo, la UQS ha generado 48 artículos indizados, 29 tesis de licenciatura, 28 tesis de maestría y una de doctorado, así como tres libros de divulgación y cinco capítulos de libro. Gabriela Rodríguez concluyó que, dentro de los planes a futuro, la Unidad busca ampliar las dos líneas de investigación existentes, con aspectos como Biorremediación y Metabolómica/Biotecnología.

En su oportunidad, el fundador de la sede Sisal y ex director de la Facultad de Química, Santiago Capella Vizcaíno, relató que desde 2004 comenzaron los primeros contactos académicos y a partir de 2007 inició su construcción, la aprobación de plazas académicas y el presupuesto ordinario por parte de la UNAM, así como la selección del personal académico y el Acuerdo del Consejo Técnico para la Creación de la Unidad de Química y la entrega de la obra.

Explicó que, actualmente, el personal académico que realiza investigación pertenece al Sistema Nacional de Investigadores; cuenta con laboratorios que brindan servicios de calidad y contribuyen a los proyectos de investigación y a la generación de ingresos extraordinarios.

En el Coloquio, participaron los integrantes del personal académico de la Facultad de Química con sede, tanto en la UQS, como en el PCTY. Durante su ponencia, Flor Árcega Cabrera, quien ha realizado estudios de Geoquímica Ambiental y Contaminación, aseveró que en Yucatán existe un problema de contaminación de agua y suelo que ha llegado a las personas. Indicó que se han encontrado en niños concentraciones de metales tales como cadmio, cromo, mercurio, cobre y arsénico, que rebasan los valores recomendados.

Precisó que en diversos estudios se encontró arsénico en la orina y la sangre de niños de la zona de Mérida. Árcega Cabrera señaló además que el arsénico se libera vía la industria avícola, a través de las heces de los pollos. Por otra parte, el mercurio se asocia con el agua para tomar y cocinar.

El académico Sergio Rodríguez Morales reportó que ha trabajado y busca resultados en las siguientes líneas de investigación: la primera relacionada con el uso de bloqueadores solares utilizados por el turismo y cómo contaminan los cenotes. La segunda se enfoca en la búsqueda de moléculas antiparasitarias presentes en organismos marinos endémicos de la costa yucateca, y una más, relativa al estudio de los neuropéptidos en la saliva del pulpo Octopus maya, para su posible empleo en la enfermedad de Alzheimer.

Posteriormente, la académica Gabriela Rodríguez Fuentes habló sobre el caso de los guayacones yucatecos, peces que resultan útiles como organismos bioindicadores en estudios de biomonitoreo para cuerpos de agua de Yucatán; es decir, son bioindicadores de la contaminación en cenotes de esa entidad.

Por su parte, Alejandra Prieto Davó se refirió a la Ecología Química y la Metagenómica para el descubrimiento de productos naturales marinos. Estableció tres aspectos importantes: optimizar los métodos tradicionales de cultivo del microorganismo productor; establecer estrategias ecológicas para aumentar la probabilidad de obtener microorganismos productores, y contar con tecnología de punta para explorar el potencial de producción en microorganismos marinos.

Marta Menjívar cerró el Coloquio con el tema Genómica de la diabetes en los mayas. Reveló dos datos de reciente publicación: aquellos genes que codifican para enzimas que depuran los fármacos no funcionan adecuadamente en los indígenas de la zona maya; es decir, los mayas depuran lentamente los medicamentos comunes para tratar esta enfermedad, esto les ocasiona malestar.

Asimismo, se encontró en once grupos indígenas una alta prevalencia de polimorfismos asociados con la diabetes en la población maya; esto es, en un reciente artículo publicado en colaboración con el Instituto Nacional de Medicina Genómica (INMEGEN), donde participó el también investigador de la FQ, Samuel Canizales, se encontró que el genoma maya es diferente, con particularidades que no tienen los caucásicos. En niños mayas, arrojan los muestreos, el 50 por ciento de éstos tiene síndrome metabólico, que es la antesala de la diabetes, por ello propuso nuevos criterios diagnósticos.

Al concluir el Coloquio, se realizó una exposición de carteles sobre los principales temas de investigación de la UQS.

Verónica Ramón, enviada