Homenaje póstumo al químico Luis Ernesto Miramontes Cárdenas

El Senado de la República rindió un homenaje póstumo al prolífico químico Luis Ernesto Miramontes Cárdenas, egresado de la Facultad de Química de la UNAM, por su vasta obra científica, cuya contribución hizo posible el primer anticonceptivo oral en el mundo, además de sus numerosas publicaciones escritas y cerca de 40 patentes nacionales e internacionales en Química orgánica, Química farmacéutica, petroquímica y Química de contaminantes atmosféricos.

A diez años del fallecimiento de Miramontes Cárdenas, esta ceremonia fue organizada por el senador por el estado de Nayart, Manuel Humberto Cota Jiménez; la Comunidad Nayarita en la Región del Anáhuac, y la Asociación de Periodistas y Escritores de Nayarit, el pasado 12 de noviembre en el Salón Octavio Paz de este órgano legislativo.

En el solemne acto, Octavio Miramontes Vidal –hijo del científico, quien estudió e impartió clases en la Escuela Nacional de Ciencias Químicas, hoy Facultad de Química de la UNAM– recordó que fue el 15 de octubre de 1951 cuando Luis Ernesto Miramontes Cárdenas, con apenas 26 años de edad, realizó la síntesis de la molécula noretisterona.

La noretisterona es el compuesto activo base que llevó a la producción del primer anticonceptivo oral sintético, mejor conocido como píldora anticonceptiva. El científico mexicano recibió la patente del compuesto junto con Carl Djerassi y George Rosenkranz, de la compañía química mexicana Syntex.

Al dar lectura a una semblanza elaborada por su hermano Luis, Octavio Miramontes Vidal señaló que el impacto de esta invención ha sido enorme a nivel mundial, porque cambió el rostro del mundo al propiciar la igualdad de la mujer y otorgarle un papel destacado en las artes, la ciencia, la política y los negocios. “El mundo pasó de golpe a ser más justo e incluyente. Pocos inventos en la historia de la humanidad han tenido un impacto similar en tan poco tiempo”, refirió.

Expresó que Luis Ernesto Miramontes fue un hombre de éxito: no tuvo riqueza, fama o poder, simplemente porque no los persiguió, pero estuvo siempre comprometido con lo importante: la búsqueda de la excelencia. “Tuvo en sus manos la riqueza del conocimiento, la riqueza de la pasión por el descubrimiento, la riqueza de la entrega”, agregó Miramontes Vidal.

Octavio Miramontes pidió también a los integrantes del Senado considerar a su padre, “uno de los mexicanos más universales y más trascendentes”, como “un candidato serio para recibir la Medalla Belisario Domínguez, que se otorga a los mexicanos más eminentes”. En los momentos que atraviesa la nación, dijo, “rescatar la memoria de sus mejores hombres es una necesidad y un acto de justicia”.

Relevancia mundial

Por su parte, el senador Manuel Humberto Cota celebró la realización del homenaje a Luis Ernesto Miramontes, “nayarita universal que siempre contó con un extraordinario talento para la ciencia y cuyo invento cambió la vida de la sociedad a nivel mundial”.

En este sentido, subrayó que la aportación de Miramontes permitió la revolución sexual y la liberación femenina. “El rostro de la sociedad no fue el mismo y fue posible la planificación familiar: las tasas de natalidad en el mundo disminuyeron notablemente en bien del medio ambiente y de la calidad de vida; el mercado laboral dio un giro al incorporar a las mujeres al mercado y se ganó en derechos de género. Fue posible el control de la explosión demográfica en el país”.

Cota Jiménez también aseguró que Miramontes Cárdenas es un nayarita distinguido que puso en alto el nombre de su estado y de México en el campo de la investigación científica, pues a partir de su aportación la historia del mundo se dividió en dos.

Recordó que en 2005, la Academia Mexicana de Ciencias determinó la invención de Luis Ernesto Miramontes como la contribución mexicana a la ciencia mundial más importante del siglo XX, y que este científico es considerado, junto con Andrés Manuel del Río (descubridor del vanadio) y Mario Molina (Premio Nobel de Química 1995), uno de los tres químicos mexicanos de mayor trascendencia universal.

Finalmente, Cota Jiménez se comprometió a promover la propuesta para otorgar la Medalla Belisario Domínguez a Luis Ernesto Miramontes, así como colocar el nombre del científico mexicano en el muro de honor del Congreso de Nayarit.

En la ceremonia también estuvieron presentes Carmen Lilia Vidal, viuda de Luis Ernesto Miramontes, y su familia; el Profesor Emérito de la UNAM José Luis Mateos Gómez, así como Leopoldo Rodríguez y Othón Canales Treviño, presidente e integrante del Patronato de la FQ; Julián Gascón Mercado y Celso Humberto Delgado, ex gobernadores de Nayarit; Santiago Cisneros Alonso, presidente del Colegio Nacional de Ingenieros Químicos y Químicos; Santiago Morales Andrade, presidente de la Comunidad Nayarita en la Región del Anáhuac, y Carlos Martínez Plata, coordinador Barra Literaria Alí Chumacero.

Además, asistieron Antonio de Jesús Muñoz, presidente de la Fundación Cultural Amado Nervo de Tepic; Angélica Araujo, senadora por Yucatán; Diva Gastélum, senadora por Sinaloa, y Melin Romero, senadora por Colima, así como alumnos de la Universidad Autónoma de Nayarit.