Para los académicos Ignacio Camacho y Gerardo Leyva, el Premio CANIFARMA 2018

En las categorías de Investigación Básica e Investigación Tecnológica

Los académicos de la Facultad de Química, Ignacio Camacho Arroyo y Gerardo Leyva Gómez, obtuvieron el segundo lugar del Premio de la Cámara Nacional de la Industria Farmacéutica (CANIFARMA) 2018, en las categorías de Investigación Básica e Investigación Tecnológica, respectivamente.

Este reconocimiento se entregó en una ceremonia realizada el 31 de octubre, la cual estuvo presidida por el Secretario de Salud y ex Rector de la UNAM, José Narro Robles; el Director de la FQ, Jorge Vázquez Ramos, y el presidente del Consejo Directivo de la CANIFARMA, Guillermo Funes Rodríguez.

Ignacio Camacho, académico del Departamento de Biología de la FQ, recibió el segundo lugar en la categoría de Investigación Básica del Premio CANIFARMA, por su trabajo La progesterona contribuye a la progresión tumoral de los glioblastomas humanos mediante un mecanismo de acción alternativo no genómico: la activación de los receptores membranales a progesterona, desarrollado en colaboración con el Instituto Nacional de Perinatología.

Esta investigación busca contribuir a la mejor comprensión de los mecanismos moleculares que subyacen a los procesos tumorales, llevados a cabo por las células de los glioblastomas multiformes humanos (el tumor cerebral más frecuente y agresivo), así como al posible desarrollo de estrategias terapéuticas más efectivas encaminadas a atenuar dicha agresividad.

En tanto, Gerardo Leyva, del Departamento de Farmacia, recibió el segundo lugar en la categoría de Investigación Tecnológica, por el trabajo Nuevo Biopolímero en forma de hidrogel para la cicatrización de heridas y prevención de infecciones, el cual está encaminado a desarrollar un nuevo biopolímero, presentado en forma de hidrogel, para promover la reparación de heridas sin la presencia de fármacos. Este nuevo biopolímero acelera el cierre de las heridas, posee propiedades antibacterianas y promueve una adecuada restauración de los tejidos.

En la ceremonia, Jorge Vázquez Ramos, quien habló como representante del jurado, dijo que en esta convocatoria se presentaron 59 proyectos, de los cuales 41 se inscribieron en la categoría de Investigación Básica, 15 en la de Investigación Tecnológica y tres en Investigación Clínica. Resaltó que en las categorías de Investigación Básica y Clínica se premiaron dos proyectos que se desarrollaron en terapia antitumoral, mientras que en la categoría tecnológica se reconoció el diseño de equipo médico para diabéticos.

El Director de la FQ enfatizó la conveniencia de que la investigación nacional “tenga un fin aplicativo que beneficiara a la industria farmacéutica, a la gente y al país. Entonces, moverse hacia la vinculación tiene que ser el resultado que se ofrezca a través de estos premios”.

Vázquez Ramos refirió que para reforzar dicha vinculación, la FQ creó la Unidad de Vinculación de la Química: una oficina de transferencia de tecnología, a través de la cual profesores e investigadores de esta Institución transfieren sus desarrollos a los diferentes sectores, entre los que sobresale el área farmacéutica. “Esto sólo es el resultado de insistir en que la academia debe producir los resultados que eventualmente lleguen a ser utensilios importantes para esta industria”, sostuvo.

Por su parte, José Narro Robles aseguró que elegir a los ganadores de este certamen es complicado porque cada vez hay mejores trabajos, con una mayor participación: “porque se ha vuelto en muchos sentidos un premio prestigiado para quienes participan, son evaluados y son reconocidos; por ello, felicito a los galardonados, a sus equipos de trabajo y a las instituciones en las que laboran”.

El Secretario de Salud dijo también que cualquiera de los premios tiene que ver con temas centrales. En ese sentido, destacó que padecimientos como el cáncer y la diabetes representan problemas de salud en los que se deben encontrar formas distintas de atención que involucren cambios en el estilo de vida, a fin de disminuir cuestiones como la obesidad.

Asimismo, Guillermo Funes Rodríguez señaló que la investigación y el desarrollo “son el alma de la industria farmacéutica, pues para que exista innovación y medicamentos tenemos que hacer investigación”. Agregó que a pesar de que la industria cuenta con departamentos de investigación y desarrollo, requiere vincularse con las instituciones de investigación y con la academia.

El presidente del Consejo Directivo de la CANIFARMA expresó: “nos sentimos afortunados de la relación que se tiene con la Universidad Nacional. Para la industria era absolutamente necesario vincularse con los centros de estudio, pues de ahí nacieron y se fortalecieron muchos de los proyectos con los que cuenta CANIFARMA”.

Fundada en 1946, la Cámara Nacional de la Industria Farmacéutica está integrada por 186 empresas establecidas en México que investigan, desarrollan, fabrican y comercializan productos farmacéuticos alopáticos, segmentados en medicamentos de uso humano y veterinario, además de productos auxiliares para la salud, reactivos y sistemas de diagnóstico.

Creado en 1974, el Premio CANIFARMA reconoce el talento y esfuerzo de la comunidad científica del país, además de apoyar la investigación básica, clínica y tecnológica en relación con medicamentos, dispositivos médicos y desarrollos biotecnológicos para uso humano. Este reconocimiento busca fomentar la actividad innovadora de los investigadores mexicanos, así como establecer y reforzar los vínculos entre la comunidad científica y la industria farmacéutica.

Yazmín Ramírez Venancio

José Martín Juárez Sánchez

Khalid Hernández Páez