Premian a grupo de investigación de la FQ por tratamiento de aguas residuales
Encabezado por académicos del Departamento de Ingeniería Química
Por el desarrollo de tecnología para el tratamiento de aguas residuales, el grupo de investigación, encabezado por los académicos de la Facultad de Química Alfonso Durán Moreno y Sergio Adrián García González, obtuvo dos importantes reconocimientos.
Con el proyecto Evaluación de la tecnología del reactor biológico tubular en una planta de tratamiento de agua residual ubicada en San Lorenzo, Xochimilco, para el cumplimiento de la NOM-001-SEMARNAT-2021, ganaron el primer lugar del Premio Rotoplas-Fundación UNAM 2022 (categoría Licenciatura), que promueve y reconoce la investigación y la innovación en materia de tratamiento de aguas, el cual realizaron desde su construcción hasta su puesta en marcha, con tecnología que cuenta con solicitud de patente aprobada.
Asimismo, obtuvieron el Premio Innovation for Sustainable Water, que otorga la empresa Rotoplas, en conjunto con el Consejo de Desarrollo de Tijuana y Fundación México-Estados Unidos para la Ciencia, por el trabajo Sistemas de tratamiento y reúso de aguas residuales.
En entrevista, los docentes explicaron que una tendencia internacional en el diseño de plantas de tratamiento de aguas residuales, tanto municipales como industriales, es construirlas cada vez más compactas y con los menores requerimientos de energía.
“Uno de los problemas más importantes relacionados con el tratamiento de aguas residuales que hemos identificado en México es la centralización del tratamiento, por ello buscamos instalaciones compactas que pudieran atender el saneamiento de las aguas residuales en forma localizada y, de esta manera, tratar el agua desde su origen y potenciar su reúso en aplicaciones en la misma área de influencia donde se generan las aguas residuales”, apuntaron Durán Moreno y García González.
La investigación tuvo como objetivo mejorar e implementar sistemas de tratamiento descentralizados para tratar el agua residual en la Ciudad de México con un reactor biológico tubular (RBT), integrado a una planta de tratamiento de aguas residuales (PTAR) compacta, donde se realizan las etapas de tratamiento biológico y desinfección en los canales de Xochimilco.
Ambos académicos desarrollaron la tecnología denominada RBT, la cual cuenta con solicitud de patente y se puede escalar para desarrollar pequeñas plantas de tratamiento de aguas residuales, para gestionar la calidad del agua en las áreas locales, por lo que son objeto de estudio a nivel mundial. Una instalación compacta puede ser aprovechada por pequeñas comunidades rurales, urbanas o pequeñas industrias para tratar sus efluentes domésticos, comentó Sergio Adrián García.
“El sistema biológico de lecho fijo propuesto en este trabajo es innovador, debido a que los microorganismos se encuentran soportados por un material polimérico de poliéster; además, con el diseño en platos horizontales se mejora el mezclado al direccionar el flujo de aire y líquido en zigzag dentro del reactor. Al mejorar el mezclado, se aumenta la transferencia de masa en la interfase líquido-biopelícula; esto se consigue al disminuir la capa límite sobre la biopelícula”, expuso.
Se trata, apuntó por su parte Durán Moreno, de una investigación desarrollada desde hace años, parte de la tesis de doctorado de Sergio García González, a partir de la cual se han ido trabajando distintos prototipos, hasta llegar al prototipo del RBT, el cual se ha utilizado en un canal en Xochimilco.
La idea de esta tecnología, añadió, es que sea compacta, barata y eficiente: “Es un desarrollo para tratar aguas residuales con distintas ventajas, sobre todo económicas, y tiene muchas aplicaciones por lo compacta que es. Estamos probando este prototipo en condiciones reales, sólo falta definir un dispositivo que se pueda comercializar”.
Este reactor biológico tubular utiliza una novedosa tecnología de fijación de biomasa que le permite ser compacto, dándole capacidad de ser instalado en sitios donde se requiera un tratamiento de agua a pequeña escala; el tratamiento in situ reduce gastos y logística de alcantarillado y conducción del agua. El sistema se construyó, armó e instaló en el barrio de San Lorenzo, alcaldía Xochimilco, con el apoyo de la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación de la Ciudad de México y la FQ.
Durán Moreno explicó que la intención del trabajo de laboratorio fue encontrar condiciones adecuadas para que, en el caso del proceso biológico, los microorganismos actúen de forma eficiente para degradar los contaminantes presentes en el agua; mientras que con el sistema de desinfección se buscó generar especies químicas capaces de destruir los microorganismos y, con ello, provocar la desinfección del recurso.
En el caso específico del barrio de San Lorenzo, la implementación de la tecnología permitirá que el agua residual tratada se pueda descargar al canal libre de contaminantes; este sistema, en diferentes puntos donde se detecten descargas de aguas residuales, podrá contribuir al saneamiento de los canales, los cuales se utilizan en la producción chinampera y para servicios turísticos.
García González y Durán Moreno, adscritos al Departamento de Ingeniería Química, encabezan un equipo en donde han participado los estudiantes de la FQ Alejandra Paola Rendón Moreno, Grecia Carolina Ramón Montejo, Lucero Iridian Escamilla Hernández, Samara Jennifer Hipólito Jiménez, Azahel Jafet Leija Chávez, Brian Palestina Pérez, Jesús Javier Barrera Osorio, Juan Luis Ruiz Gregorio, Santiago Gavaldón Sánchez y Héctor Pozos; así como Salvador Samuel Zurita González, de la Facultad de Ingeniería de la UNAM.
José Martín Juárez Sánchez
Yazmín Ramírez Venancio